La técnica es sencilla.
Se hincha un globo del tamaño que se quiera la bola final. Yo hinché globos de agua para que no fueran excesivamente grandes.
Lo colocamos sobre un bote para manejarlo con menos dificultad.
Se cortan tiras de papel con el grosor y largura adecuados para luego trabajarlos. Es decir, por la curva del globo no podrán ser demasiado anchos y tampoco mucho más largos que el perímetro final.
Se cubre el globo con varias capas de papel y cola de escolar diluida en agua con la ayuda de un pincel. La proporción de la cola y el agua sería una proporción de cola, dos de agua.
Se deja secar, y se pincha el globo. Dependiendo del hueco que se haya dejado se podrá extraer el globo o no pero no se va a ver si se queda dentro.
Se pinta el globo del color deseado y se deja secar.
Se decora al gusto y teniendo en cuenta que la base es papel, es decir, que se reblandece al contacto con las cosas húmedas.
Yo utilicé una brillantina que tenía cola y a uno le puse unas bolitas blancas para decorar.
Para poner la cinta, utilicé un clip. En él coloqué la cinta elegida de tal forma que el clip dentro de la bola se quede horizontal, pero introduciéndolo de forma vertical.
Éste sería mi resultado:
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